El pasado 15 de Junio del presente año nuestros compañeros del Blog "Gente de Paz" publicaban una entrevista a Doña María del Carmen Hinojo Rojas. Recordamos que María del Carmen fue una de los dos candidatos a Hermano Mayor de la Hermandad del Calvario en las elecciones celebradas el pasado año. Hoy, 13 de Julio, que se cumple un año de la celebración de las mismas transcribimos la entrevista íntegra de nuestros compañeros de "Gente de Paz. Disfrútenla.
Hace un
año nos concedía una entrevista antes de las elecciones a Hermano Mayor del
Calvario ¿Qué cosas han cambiado de entonces a ahora?
La Hermandad del Calvario ha sufrido una serie de
cambios evidentes a lo largo de este año: el número de hermanos ha disminuido;
los nazarenos que realizan Estación de Penitencia son cada vez menos; se ha
reducido el número de costaleros; se ha producido la destitución del capataz, D.
Fernando Chiachio, con más de veinte años al frente de los Pasos y hermano de
la Cofradía; se han nombrado dos nuevos capataces con escasa experiencia ajenos
a nuestra hermandad; se ha contratado una Banda no acorde con el estilo clásico
que caracteriza al Señor del Calvario; cada vez acuden menos hermanos a los
cultos y, sobre todo, se ha producido una fractura de los hermanos aún mayor e
irreconciliable.
Desde mi punto de vista los cambios han sido a
peor. Una hermandad se afianza aumentando el número de hermanos, comunicando la
importancia de vestir la túnica durante la Estación de Penitencia y acudiendo a
los cultos.
Como le dije en mi anterior entrevista una hermandad
con patrimonio pero sin hermanos no tiene futuro.
El problema es que, al rodearse las cofradías
(peor aún, plagarse) de gente incapaz de perfeccionarse, de pensar con mente
propia, éstas corren un gravísimo peligro para su superación y evolución, tanto
individual como colectiva.
Los dirigentes de nuestras hermandades tendrían
que hacer un poco de autocrítica de su gestión en un gesto de humildad. Equivocarse
puede ser digno, pero equivocarse a sabiendas es escandalosamente indigno. Las
instituciones merecen respeto, y también, respeto superior, las personas.
Fue un
proceso electoral complicado, impugnación incluida, qué opinión le merece lo
que sucedió.
El primer sentimiento que me invade es el de
tristeza... Recuerdo el proceso electoral como el episodio más turbio de
nuestra hermandad al estar rodeado de falta de transparencia y credibilidad.
Existían testimonios fiables que avalaban la existencia de vicios graves
durante la celebración del cabildo de elecciones como eran el voto de hermanos que
no tenían, presuntamente, la antigüedad suficiente (un año) para votar y la
manipulación, presuntamente, del censo electoral una vez terminado el plazo de
revisión del mismo, previo a la celebración de las elecciones y que pudieron
afectar a las garantías del proceso electoral y alterar su resultado.
Igualmente, considerábamos de suma importancia la declaración del entonces
secretario de la hermandad, que conocedor de la clave del ordenador donde se
custodian los datos personales de los hermanos, así como de las personas que,
conociendo también la clave, tenían acceso al mismo y que podían,
presuntamente, haber manipulado datos pertenecientes al registro de hermanos. El
propio secretario me reconoció que a ese ordenador tenían acceso varias
personas, lo que atenta el principio de seguridad jurídica previsto en la Ley
de Protección de Datos que es taxativa e imperativa en este asunto tan delicado.
De ahí que el
mismo día de las elecciones, el 13 de julio del pasado año, una vez concluida
la votación se procedió a la impugnación de los resultados, expuesta
verbalmente, in situ, al observarse un defecto de forma en el transcurso de la
misma.
Posteriormente, tras una reunión convocada por
nuestro consiliario al día siguiente, 14 de julio del pasado año, no se llegó a
un acuerdo al no darnos la otra parte argumentos efectivos ni veraces que
justificaran que el proceso electoral fue inmaculado. No era suficiente alegar
que el censo estuvo expuesto a la consulta de los hermanos, sobre todo cuando
el mismo día de las elecciones constatamos que hubo ciertas personas que
presuntamente no podían votar y lo hicieron. De ahí que al no estar conformes
se presentara a la Autoridad Diocesana el escrito de impugnación.
A finales del mes de julio (con sorprendente
rapidez) recibimos respuesta del Delegado diocesano para Hermandades y
Cofradías a través de carta en la que manifestaba que “los argumentos en los que
se fundamenta la impugnación de las elecciones se basan en presuntas
irregularidades en el censo electoral y en el hecho de la votación de personas
concretas. Presuntas irregularidades que quedan perfectamente aclaradas en la
reunión mantenida con el Consiliario de la Cofradía, Rvdo. Sr. D. Rafael
Rabasco Ferreira, con fecha de 14 de julio de la que se levantó ACTA que ha
sido remitida a esta Delegación Diocesana”.
Resulta asombrosa esta respuesta cuando en esa
reunión le manifesté de viva voz a nuestro consiliario que no estábamos
conformes con lo que allí se habló, de ahí que se presentara la impugnación en
documento escrito ante la Autoridad Eclesiástica. No habría tenido sentido
presentarla si hubiera habido conformidad, es más, desconocemos el contenido
del ACTA que se presentó en el Obispado de la citada reunión que, por otra
parte, ni siquiera firmamos las dos personas de mi confianza que me acompañaron
ni yo misma.
Este asunto de las elecciones ni siquiera se
investigó, no interesaba, era mejor dejar cumplir el mandato electoral y que el
tiempo pasara, olvidar lo sucedido. “No
hay nada que el tiempo no borre”. De nuevo la falta de transparencia...
¿Es
legítima la actual Junta de Gobierno?
En principio diferenciaría dos conceptos,
legitimidad y legalidad, que no tienen el mismo significado. En este caso
utilizaría el término legal en cuanto la Autoridad Eclesiástica confirmó en su cargo al hermano mayor así
como a los demás miembros de la junta de gobierno.
La diferencia entre
legalidad y legitimidad ha sido una cuestión fundamental de la teoría política
y el Derecho desde los inicios del pensamiento humano. En ocasiones
entendemos que ciertos comportamientos son legales pero ilegítimos. Legalidad
es cumplimiento de la ley, acatar la ley, actuar según dice la ley. Es un
término jurídico. Legitimidad es un término con una gran repercusión moral: es
el deseo de hacer el bien, es la voluntad de bien. Legalidad lleva a justicia
legal. Legitimidad lleva a justicia en el sentido humanístico.
En España se suele
confundir ambos términos. Es legal desde el momento en que es aprobada por la Jerarquía,
pero en ningún caso es legítima si recordamos que se llamó a personas muy
mayores, se las recogió, se las llevó a votar y se las devolvió a sus hogares. Desde
entonces estas personas no han sido llamadas, invitadas ni han participado en
ningún acto de la hermandad, llegándose a dar la bochornosa circunstancia de
preguntar, a pie de urna, por el nombre de la persona a quien debía votarse.
Esto es legal, pero no es legítimo.
Un miembro
de Gente de Paz, por una afirmación similar a la expuesta en la pregunta
anterior fue convocado por el actual Hermano Mayor del Calvario ¿Cómo lo
valora?
Mire, la ignorancia
suele entenderse de forma general como falta de conocimiento acerca de un
asunto determinado y fruto de ese desconocimiento hay personas que se sienten
atacadas, tomándolo como un insulto pero esto no es excusa para hacer mal las cosas, el sentido común debe bastar.
Presumiblemente el Hermano Mayor decidiera
solicitar información a un componente de Gente de Paz para aclarar sus dudas,
ya que este Blog tiene un reconocido prestigio en el ámbito cofrade.
¿Se
arrepiente de haberse presentado?
No, en absoluto. La respuesta de los hermanos que
acudieron a votar fue importante y la ilusión por el cambio era evidente. Mi
candidatura obtuvo un alto número de votos a favor y las muestras de apoyo y
cariño fueron numerosísimas. Todo esto hace que la experiencia sea muy
positiva.
Mire, uno de los dramas contemporáneos más
extendidos en la sociedad es “la corrupción
del alma”. Así se denomina la conducta de las personas que se traicionan a sí
mismas, a su conciencia, en última instancia todos los seres humanos sabemos
cuándo estamos haciendo lo correcto y cuándo no.
Nosotros actuamos en todo momento durante el proceso electoral conforme
a la legalidad vigente y eso, créame te deja la conciencia muy tranquila.
Considero que hay
quienes sólo son ganadores para sí mismos, con una mediocre autosatisfacción y
hay quienes realmente son ganadores en cosas trascendentes y son éstos a
quienes admira la mayoría.
¿Cuáles
han sido los apoyos que ha tenido en este tiempo?
Los mismos que tuve en el período electoral: numerosos
y generalizados. Lo acredita la implicación continua de muchos hermanos y su
constancia por que se esclarezca la verdad; la ilusión compartida y la
intensidad del cariño y respeto demostrados, que además entraña disfrutar de su amistad.
También he recibido grandes muestras de afecto de
cofrades de distintas Cofradías de nuestra ciudad y de fuera de Córdoba. A
todos les manifiesto desde aquí mi agradecimiento más sincero.
Desde la
autoridad parroquial, ¿ha sentido muestras de apoyo?
Mi relación con el párroco de San Lorenzo y a la
vez consiliario de la cofradía, Rvdo.
Sr. D. Rafael Rabasco Ferreira siempre ha sido cordial y pienso que de afecto y
respeto mutuos.
En las numerosas ocasiones que nos hemos reunido
con él siempre nos ha recibido con amabilidad y ha sido informado antes,
durante y después de las elecciones de todas nuestras preocupaciones e
inquietudes respecto al proceso electoral. Considero que era una obligación
acudir a nuestro consiliario que, como pastor de la Iglesia y autoridad en la parroquia,
podía ofrecernos su consejo. Siempre que hemos hablado con él lo hemos hecho a
corazón abierto y con el alma en la mano, créame.
Pasadas las elecciones D. Rafael me pidió
reiteradamente y de conformidad con el nuevo hermano mayor (según me
manifestó), entrar a formar parte de la nueva junta de gobierno, pues estimaba
que mi proyecto no se debía perder ni esperar tanto tiempo para ponerlo en
práctica, aparte que había un gran número de hermanos que me demostraron su
lealtad y que sabía estaban dispuestos a trabajar no solo por la hermandad sino
también por la parroquia.
Agradeciéndole su confianza, no pude aceptar su
solicitud pues hubiera supuesto posicionarme junto a personas de las que
desconfiaba y cuya gestión futura tenía claro no sería la mejor para la cofradía.
Ni mi hermandad, ni mi honestidad, ni mi propia familia merecían ese
sacrificio.
Por otro lado, D. Rafael siempre nos ha
argumentado su absoluta neutralidad y su posicionamiento a favor de la
legalidad, nos ha trasmitido la
necesidad de llegar a la unidad entre todos los hermanos, cosa difícil a tenor
de lo acontecido por más que le hubiéramos puesto buena voluntad.
Sin embargo determinadas actitudes e
intervenciones posteriores de nuestro consiliario han puesto en evidencia
que la tal “neutralidad” no ha existido nunca. El consiliario de una hermandad
tiene derecho de veto en cuestiones que se refieran a la fe y buenas costumbres y sus funciones
son fundamentalmente la animación espiritual de los miembros de la hermandad,
contribuir a que ésta mantenga siempre su naturaleza y fines eclesiales y
fomentar la participación de la misma en los planes pastorales diocesanos de
acuerdo con los objetivos de la hermandad, según está previsto en el art. 37 de
nuestras vigentes Reglas.
Considero que hay cuestiones en las que el consiliario
de una cofradía debe ser y parecer neutral. De ahí que, a pesar nuestro y con
el debido respeto, el sentimiento que a todos nos embarga en la actualidad es
el de profunda decepción porque nos hemos sentido en el más absoluto desamparo y
desprotección.
Tras la
posesión del nuevo hermano mayor, el capataz titular de la Hermandad fue
destituido junto a su equipo ¿Cree que fue una decisión justa?
El propio Hermano Mayor lo nombró capataz
titular tres años antes.
D. Fernando Chiachio consiguió afianzar la
cuadrilla del Señor, con dos cuadrillas completas y personas interesadas en
ingresar en ella.
Consiguió que la cuadrilla de la Señora se
doblara igualmente, lo que no había ocurrido desde que este Paso sale con
hermanos costaleros.
La cuadrilla del Calvario (pensando ya en
una única cuadrilla de la hermandad) ha sido nombrada en pregones de Semana
Santa de Córdoba y Exaltaciones por el nivel que estaba alcanzando (sólo hay
que tirar de hemeroteca para poder comprobarlo), así como durante las
retransmisiones de Canal Diócesis (desde la Catedral).
No en vano esta cuadrilla fue elegida para
la Procesión Extraordinaria de San Rafael en 2012, celebrada el 24 de octubre.
Cabe recordar igualmente que una gran
parte de los costaleros son hermanos de la hermandad, participando activamente
en montajes, desmontajes de cultos, procesión, venta de lotería, turnos de
barra, cocina en la Cruz de Mayo, etc. Desgraciadamente desde las últimas
elecciones ningún miembro de la cuadrilla ha recibido llamada alguna para
ninguna de estas actividades (y no es que sea necesario, pero la ausencia de
una llamada, tan constantes en otros tiempos, denota cierto desinterés por la participación
de estos hermanos).
Las formas
en que se informó al capataz de la destitución, ¿fueron las adecuadas?
En absoluto. Lo
correcto es convocar al interesado en la sede de la hermandad y explicarle los
motivos de la destitución. Del mismo modo lo adecuado es entregar una carta
informando del acuerdo de Junta. Por el contrario se le convocó en plena calle
y se le "despachó" en cuestión de minutos.
Por otra parte, las razones que alegó para
destituirle son bastante simples y faltas de fundamento. No se puede vincular
una destitución al hecho de que el capataz mostrara su apoyo a mi candidatura.
Una persona no es capataz todo el año como tampoco es nazareno o penitente los
365 días seguidos; es un hermano más que el día de la Estación de Penitencia
participa en el cortejo dirigiendo un Paso y que además tiene derecho a
adherirse a una candidatura, sea la que sea. Lo contrario sería limitar el
derecho a elegir en un cabildo de elecciones a la persona que crea más idónea.
Todos sabemos que existían razones personales que
escondían la verdad de esta destitución que, además, resultaba incongruente
cuando el año anterior el propio hermano mayor felicitó PÚBLICAMENTE al capataz
y su equipo por la buena Estación de Penitencia.
Hemos
visto en este tiempo como las cuadrillas de ambos pasos han sufrido bastante
para poder hacer una estación de penitencia digna ¿Qué opinión le merece?
Hay detalles que pueden ser tomados como
provocaciones, o tal vez como soluciones; me explico. Hasta 2014 el repertorio
de la hermandad estaba siendo cada vez más clásico e incluso, tal y como lo
calificó un antiguo hermano mayor, triste. Tanto es así que el repertorio de
2014 fue extremadamente escueto, debiendo la Banda de Cornetas y Tambores de
Nuestro Padre Jesús Despojado tener que repetir bastantes marchas ante la
inexistencia de un repertorio amplio que diese para poder completar el
recorrido. Cualquier tipo de marcha que sonase a Triana, alguna propia de la
banda granadina o cualquiera que pudiera considerarse como "alegre"
fue eliminada del repertorio durante los últimos años.
Sin embargo tanto durante los ensayos como
durante la Estación de Penitencia del pasado Miércoles Santo se interpretaron
marchas hasta ahora "prohibidas", cambiando el estilo y sello de la hermandad,
como digo, establecido durante los últimos años.
Este detalle puede ser considerado como
una provocación o, tal vez, como un recurso para poder atraer a costaleros a la
cuadrilla. Es evidente que ante costaleros hermanos tienes más poder coercitivo
que ante costaleros que vienen a echar una mano.
¿Cómo valora lo
que lleva de mandato la actual Junta de Gobierno?
El proyecto del actual Hermano Mayor
incorporaba como propuestas, entre otras, las siguientes:
1.- Redacción de
un “Plan director de las obras de Casa de
Hermandad” y comienzo de ejecución del mismo. A día de hoy los
hermanos no tienen constancia de este Plan Director ni
de su elaboración.
2.- Asimilación de los correos electrónicos como medio de comunicación
permanente con el hermano. No sólo no se están enviando mensajes
electrónicos a los hermanos, sino que los últimos envíos han mantenido un
elevadísimo número de incidencias; lo que se traduce en hermanos a los que no
se les ha informado personalmente de las actividades, convocatorias, etc. desde
las últimas elecciones (Facebook no puede ser considerado un medio válido para
la comunicación a los hermanos).
3.- Replanteamiento de la política de comunicación con los hermanos y con los medios de comunicación. Los distintos actos
desarrollados por la hermandad están siendo comunicados de manera general (no
personalizada) a través de redes sociales (con lo que un gran número de
hermanos, de avanzada edad, no tienen acceso a las mismas), y el mismo día, o a
lo sumo el anterior a su celebración. Es inviable conseguir una planificación
familiar/laboral/cofrade cuando los actos se anuncian casi “sobre la marcha”.
4.- Apertura
de nuevas vías de financiación. Tras el primer año del segundo mandato del
actual hermano mayor, se desconoce si esta propuesta, tan genérica, ha sido
objeto de trabajo por parte de la hermandad. Se anunciaba la colaboración con
entidades como Diputación Provincial, pero igualmente se desconoce el estado de
dicha promesa.
5.- Explotación
del bar con una cuota fija. Desconocemos si a día de hoy se ha
contactado con algún posible concesionario, aunque lo que es evidente es que la
hermandad no ha publicado un pliego de condiciones, públicas, para convocar un
concurso y conseguir de esta manera las mejores condiciones posibles para dicho
contrato. Ha pasado un año desde las elecciones y no se conoce avance alguno al
respecto.
6.- Creación
de la beca para nuevos hermanos.- hermanos sin posibilidades. Este
punto resulta especialmente curioso, pues tras el anuncio de la creación de
estas becas, seguimos sin conocer en qué consistirían (becas a estudio,
emprendimiento, cuotas de hermanos, etc.), toda vez que a los hermanos que por
algún motivo se han demorado en el pago de sus cuotas de hermanos (los motivos
son una cuestión privada entre hermanos y hermandad) durante los últimos años
(recordamos que el actual hermano mayor comenzó en 2014 su segundo mandato), se
les ha llamado insistentemente a sus hogares e incluso se les ha puesto
impedimento para poder participar en la Estación de Penitencia.
7.- Implicación
con la obra social en la parroquia “mano a mano”: Creación de un grupo de trabajo de
Caridad “Simón de Cirene”. Este punto me resulta de los más
importantes, pues si en verdad la hermandad tiene conciencia de la situación
por la que pasan algunas personas, tras un año se debería haber avanzado en
este asunto (casi por delante de otros muchos). Seguimos sin noticias al
respecto.
8.- Alcanzar
la cifra de 300 nazarenos en 2018. Los datos oficiales de nazarenos
(publicados por la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba) nos
arrojan un total de nazarenos de 189, 176 y 154 en 2008, 2009 y 2010, año este
último en el que el actual hermano mayor ya formaba parte de Junta de Gobierno.
Durante este año el número total de nazarenos escasamente ha superado los 100.
Se desconocen los proyectos de la actual junta de gobierno para aumentar el
número de nazarenos, si bien lo único cierto y contrastable es el continuo
descenso desde su toma de posesión (hace ahora 5 años).
9.- Elaboración
del Reglamento de Régimen Interior. Durante el primer mandato del
actual hermano mayor, se prometió realizar un Reglamento de Régimen Interno.
Esperemos que se pueda presentar a los hermanos para su aprobación en los 3
años que restan de mandato.
10.- Adopción
de medidas para la correcta conservación del patrimonio. Algunas promesas
son realmente curiosas, como ésta, toda vez que bajo el mandato de este hermano
mayor se ha vendido ajuar de la Virgen sin autorización previa y expresa de los
hermanos.
Al menos
en dos ocasiones, se ha postergado la Misa Mensual de Hermanos y el posterior
rezo del Vía Crucis ¿Cree que eso perjudica la imagen de la corporación?
La imagen es de inconsistencia en los
cultos. Tal vez lo más grave que le puede ocurrir a una hermandad.
Tampoco se rezó el Santo Vía Crucis
durante la Estación de Penitencia de
la pasada Semana Santa como es preceptivo y contemplado por nuestras Reglas en
su Título II, artículo 7.-1., produciéndose un incumplimiento grave de las
mismas porque para tal fin se fundó la Hermandad del Calvario.
El Cabildo
de hermanos no aprobó las cuentas presentadas por la Junta de Gobierno ¿Qué
motivos indujeron a esta reprobación?
El motivo principal lo planteó el propio tesorero
durante la exposición de las cuentas, quien dijo durante una de sus
intervenciones que reconocía que las cuentas estaban mal y que incluían
errores, pero que él no tenía formación en la materia y no podía hacer más.
Insistió en varias ocasiones en los errores que él mismo sabía que contenían y
en el hecho de que sospechaba de que las cuentas serían reprobadas, pero que no
podía hacer más.
No en vano las cuentas de la Hermandad del
Calvario son casi secretas. Se proyectan con un detalle mínimo, y ante
cualquier pregunta realizada por los hermanos suele haber un silencio previo
antes de recibir una respuesta, la cual no siempre viene del tesorero, sino del
miembro de la junta que en dicho momento sepa contestar.
Entrando en detalle, la hermandad presentó
un presupuesto de más de 250.000 euros, pues se había presentado las cantidades
correspondientes a la hipoteca de la nueva casa hermandad como ingresos (a lo
sumo sería un cobro, pero en ningún caso un ingreso) y la compra como un gasto.
No se ofreció detalle del precio total de
la nueva casa hermandad, ni de las condiciones que regularían la hipoteca. No se
presentó, ni tan siquiera, un calendario de amortización del préstamo.
Partidas de “otros gastos”, con importes
cercanos a los 7.000 euros, son presentadas sin mayor explicación. Entre las
cuestiones que han quedado sin resolver están los gastos derivados de las
cartas enviadas por la candidatura del actual hermano mayor durante el proceso
electoral, según lo establecido en el artículo 36 de la Normativa
Complementaria al Estatuto Marco, no habiendo podido comprobar que, por poner
un ejemplo, ha existido un gasto y un ingreso por la misma cantidad y
correspondiente al coste del envío.
Por nombrar otro
ejemplo, los hermanos no podrían haber aprobado las cuentas presentadas por
haberse faltado a lo estipulado en el artículo 21 de la Normativa
Complementaria al Estatuto Marco, donde se establece que “En la rendición
anual de cuentas, conforme a lo prescrito en el canon 319, se deberá dar cuenta
exacta del empleo de las ofrendas y limosnas recibidas. Asimismo, se
determinarán las cantidades destinadas a las actividades caritativas y
sociales y las aportaciones realizadas a la economía parroquial”. Todo este
punto queda saldado en las cuentas presentadas con una línea en el apartado de
gastos titulada “Obra social”, por una cantidad determinada pero sin el menor
detalle ni explicación.
La hermandad celebra
varios actos benéficos o destinados a la obra social durante el año, quedando
sin explicar cuáles son los resultados (ingresos y gastos reales) de dichos
actos, entre los que se encuentra la venta de dulces conventuales. No se ha
conseguido saber el importe de los dulces (gasto para la hermandad), el IVA que
dichas compras supone, los ingresos totales, la cantidad destinada a obra
social, etc.
Como comprenderá,
tomando estos puntos como ejemplos, el cabildo de hermanos no puede sino
rechazar las cuentas presentadas hasta su correcta formulación.
El
Obispado las ha aprobado ¿Cuáles cree que han sido las causas?
Las cuentas han
sido aprobadas por la Autoridad Eclesiástica tres meses después de que fueran
reprobadas por los hermanos en el cabildo de cuentas.
En este asunto
el Obispado ha tardado más en resolverlo. Lo que significa que las cosas no
estaban claras y las cuentas menos. Presumiblemente se halla hecho una
investigación para ponerlas en orden y para ponerse de acuerdo los peritos,
pues sospecho que habría disparidad de criterios sobre la oportunidad de su
aprobación.
Desde mi punto
de vista se han aprobado, presuntamente, para evitar otras realidades más
desagradables a ojos de la opinión pública porque de haberse aprobado las
cuentas tal y como las presentó el tesorero sería algo muy grave.
De todas formas
es importante recordar que existen mecanismos legales para reprobar las cuentas
aprobadas por el Obispado, por si alguien desconoce esta posibilidad.
Conviene traer a
la memoria que conforme al art. 8 del Estatuto Marco la Asamblea General de hermanos es el órgano supremo de gobierno y
está integrada por todos los miembros de la Hermandad de acuerdo con lo
establecido en el artículo 6 del citado Estatuto y cuyas competencias están
previstas en el art. 9 del mismo.
¿Ha
sentido un trato diferente, por parte de la Autoridad Diocesana, a cuando
realizaron la impugnación de las elecciones?
Con sinceridad, no. Considero que tanto el asunto
de las cuentas reprobadas como el de la impugnación de las elecciones no se han
investigado en profundidad.
¿Cree que
en otros procesos similares se ha actuado de igual forma?
No, ni mucho menos. En otros procesos similares
se ha actuado de diferente forma tanto en asuntos de elecciones como en
cuestiones de cuentas. La mediación de los consiliarios ha sido decisiva para
que el Obispado intervenga en un sentido o en otro.
A la luz
de estos acontecimientos ¿Hay una fractura social en la Hermandad del Calvario?
Desgraciadamente, sí. La fractura es total y cada
vez mayor, hay actitudes que no se pueden ni deben admitir.
Mire, por
naturaleza, todas las cosas o acciones tienen su límite hasta donde es
permitido actuar, es decir, sin llegar a la instancia de asumir conductas que
alteren la legalidad y las costumbres, reglas básicas de organización jurídica
y social, las cuales forman parte de la cotidianidad y del desarrollo de la
convivencia en el seno de una hermandad o de cualquier institución.
Una cosa es
tener poder, y otra cosa muy diferente es ejercerlo sin sobrepasar la línea
permitida, pues es ahí donde se configura el llamado abuso de esa condición de
ostentar poder, lo cual suele ser traumático para las instituciones.
De los
miembros que la acompañaron en su candidatura, qué destacaría.
Son muchas las virtudes a ponderar de todos ellos
pero, además de sus profundos valores cristianos, destacaría su honestidad,
bondad, sencillez, lealtad, sentido de la responsabilidad, educación, preparación
cultural y su profundo amor hacia nuestros Titulares.
En todo momento consideré que eran las personas
más idóneas que podían acompañarme en ese proyecto común. Eternamente les agradeceré
ese acto de generosidad y confianza hacia mí.
¿Volverá a
presentarse?
Sinceramente, no lo sé. El futuro es incierto y
aún queda mucho tiempo para meditar sobre esa posibilidad.